Llevo unos días pintando en la montaña de León, y este es uno de mis primeros cuadros en proceso. Es el frente de mi casa, con las nubes bajas y luminosas que vienen de Asturias y un cielo de un azul violáceo que sólo se me ocurre interpretar, porque es inimitable. Es un tema recurrente dentro de mi serie Brillo, que expondré en Madrid los últimos meses de este año.
A pesar de que en casi toda España hay alerta por el calor, aquí se está de maravilla: días soleados y noches fresquitas. Que duren mucho estos días. Saludos.
Hola Isabel, que suerte tienes por que aqui en Toledo el calor es insoportable.
ResponderEliminarMe gusta mucho ese trabajo, espero poder ver la exposición.
Un cordial saludo.
Me alegra verte tan relajada, Isabel, pintando en ese tu paisaje (ya sólo se me ocurre llamarlo así). La pintura que nos enseñas y el título de la serie que vas a exponer no pueden ser más congruentes.
ResponderEliminarMe gustaría poder asistir, verla. En Octubre casi con toda seguridad iré a Madrid, pero tal vez sea pronto ¿no?...en todo caso, lo intentaré, es sincero mi deseo de poder ver tus obras al natural.
Recibe un abrazo
Isabel yo dejaria el cuadro asi como esta!, pero cuando pinto algo siempre lo retoco hasta quedar conforme, esas cosas que tiene el arte
ResponderEliminar!Qué disfrutes y pintes muchísimo!
ResponderEliminarBesos a las dos
Que sigas disfrutando de esos días fresquitos y del placer de la pintura.
ResponderEliminarYo espero impaciente ver ese cielo violeta interpretado en tu obra.
Besos
Da gusto verte sumida en la magia tantas veces compartida, de Canseco....magia, belleza, serenidad, naturaleza pura y especialmente inspiración creativa
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